miércoles, 30 de septiembre de 2015

Los soportes funcionaron

Ayer comentamos que en la apertura del mercado, a pesar de las fuertes caídas de las bolsas asiáticas, las bolsas europeas consiguieron mantenerse por encima de los mínimos del día 24 de agosto. Al igual que no había una razón específica para justificar las correcciones desde el pasado 17 de septiembre, tampoco hay que intentar buscarlas en el rebote de ayer y de hoy de las bolsas. Se puede decir que los malos datos de inflación de Alemania y Japón provocarán que irremediablemente los bancos centrales sigan con políticas monetarias muy agresivas y por eso subimos.

Pero sencillamente creemos que los movimientos siguen obedeciendo más a lo que estamos reiterando desde hace justo un mes. Tras la fuerte caída de agosto, tendríamos un movimiento lateral con alta volatilidad en el que los inversores deberían aprovechar para adaptar sus carteras al nuevo entorno de menor crecimiento e inflación. Reduciendo riesgos tras varios días de subidas y aumentándolos tras varios días de bajadas. Mientras no salgamos de este terreno lateral, ir mirando los movimientos intradía sólo nos traerá quebraderos de cabeza y corremos el riesgo de tomar decisiones erróneas si vamos detrás del mercado comprando pensando que el rebote es bueno o vendiendo si pensamos que irremediablemente esto romperá por abajo.

El gráfico del S&P500 sigue siendo clave en el movimiento de los mercados. Ayer se acercó a la zona de 1.850 y hoy el futuro viene rebotando en esa zona, por lo que anima a los inversores a pensar que se puede formar un rebote en la zona de soporte.

Evolución del futuro del S&P500.


  
Lo mismo ocurre con el DAX alemán al tocar los mínimos de agosto. La línea roja discontinua que aparece en el gráfico es la que une los mínimos de 2011 y 2014 (las dos últimas correcciones del DAX desde que se inició la actual tendencia alcista en 2009) . Así que la bolsa alemana se encuentra claramente en soporte. Si para el S&P500 el lateral está situado entre 1.850 y 2.000 puntos, para el DAX lo situamos entre 9.300 y 10.500 puntos.



Para el Eurostoxx 50 el rango se sitúa entre 3.000 y 3.300 puntos. En el gráfico se aprecia claramente cómo ha funcionado la zona de 3.000 puntos de mínimos del 24 de agosto.



El Ibex, afectado por el riesgo político, por Latinoamérica o sencillamente por la composición sectorial (ayer vimos que hay sectores que siguen fuertes y de esos tenemos pocos en el IBEX), ha perdido el lateral y lo que estamos es en un canal bajista de corto plazo que situamos entre 9.000 y 10.000 puntos.


China ofrece un aspecto similar a España, con un lateral bajista en vez de lateral cómo el de Estados Unidos y Alemania. Situado ese lateral entre 20.300 y 22.000 puntos.



En definitiva, el S&P500 sigue siendo el índice directriz de las bolsas mundiales, y lo es más cuando la situación se vuelve más confusa. Si el S&P500 rebota, el resto de mercados le acompañarán. Así pues, los inversores que en los días de pánico no aguantaban más y estaban dispuestos a realizar minusvalías, deben aprovechar estos días de mayor tranquilidad para deshacer riesgos. Si mañana los datos de producción industrial de los principales países no salen tan malos cómo está adelantando la bolsa desde julio, el rebote continuará y posiblemente nos acerquemos de nuevo a las zonas de resistencias comentadas. 

martes, 29 de septiembre de 2015

Testeando los mínimos de agosto

Las bolsas europeas han abierto en negativo tras los fuertes recortes de esta madrugada del Nikkei y de las bolsas chinas. Sin duda hay bastante miedo a la reacción del mercado al dato de PMI manufacturero de China y del resto de potencias mundiales que se publicará el próximo jueves. El mercado, al igual que ocurrió la semana pasada con el dato de producción industrial se está posicionando esperando datos peores que el mes pasado (49.7). Recuerdo que la semana pasada las bolsas corrigieron un 3% el día antes de la publicación y el día que se conocieron los malos datos, no siguieron cayendo.

El mercado sigue demostrando muchísima sensibilidad a los datos de contracción de la economía china. Por tanto, no hay que descartar que a pesar de que los datos macro europeos y de Estados Unidos no se están viendo contagiados en exceso, las bolsas siguen adelantando que los datos macro empeorarán los próximos meses. Así que no se puede descartar que las bolsas europeas y de Estados Unidos pierdan los mínimos de agosto.

De momento no está ocurriendo y hoy, a pesar de las debacle del Nikkei, las bolsas europeas se han girado al alza justo al acercarse a los mínimos intradía marcados el pasado 24 de agosto. El DAX, que es el índice más afectado estos días tras la debacle del sector autos, hoy se ha parado justo en los mínimos de ese día y está rebotando con fuerza recuperando un 2%. No sabemos si es porque se están saliendo los cortos o porque los inversores apuestan por el rebote, pero el caso es que los soportes están funcionando.   



Lo mismo está ocurriendo en el Eurostoxx 50. Los mínimos de hoy coinciden con los mínimos de la semana pasada y mínimos de agosto y zona de soporte de diciembre del 2014, además de ser un número entero (3.000 puntos).



Fuera de Europa, el S&P500 ayer también cerró cerca de los mínimos de agosto aunque los futuros se han dado también la vuelta al acercarse a los mismos. En el gráfico del futuro del S&P500 se aprecia que es la zona de 1.850 puntos la zona clave para este índice.



Viendo este gráfico se aprecia perfectamente el movimiento lateral que comentábamos a final de agosto cómo el movimiento más probable. Ahí seguimos con el S&P500 moviéndose entre 1.850 puntos y 2000 puntos. Y ahí podríamos seguir hasta que comiencen a publicarse datos de este tercer trimestre sobre todo de resultados empresariales. Tras las fuertes caídas de las últimas jornadas, lo más probable es que haya un nuevo rebote. Es verdad que los rebotes son cada vez menores demostrando la debilidad actual del mercado y por tanto aumenta la probabilidad de que los soportes terminen cediendo. Pero de momento están aguantando y por tanto nuestro escenario sigue siendo el mismo. LATERAL A LA ESPERA DE QUE LA MACRO Y MICRO CONFIRMEN O DESMIENTAN LOS TEMORES DE LAS BOLSAS EN AGOSTO.

Normalmente cuando estamos ante la posibilidad de un techo o suelo de mercado suelo echar un vistazo a la situación de los sectoriales. Es verdad que si miramos valores o sectores de forma individual tenemos la sensación de que la bolsa está mucho más baja que en agosto. Y es que hay determinados sectores que han seguido cayendo en picado mientras otros aún están lejos de los mínimos de agosto. Evidentemente los que han seguido corrigiendo a plomo son los relacionados con la explotación de materias primas, y esta última semana se ha unido el sector de autos. Pero mirándolos todos en su conjunto tenemos en general a los sectores bajistas en zonas de suelo y los alcistas siguen siéndolo o están también en zonas claras de soporte.

Sectores bajistas.

Eurostoxx 600 de Recursos básicos. Ha perdido todos los soportes de corto plazo y a priori no parece que haya otro hasta la zona de mínimos de 2009 que no anda muy lejos (215 puntos). Después de la tremenda caída se acerca el momento en que los que apostaban a corto en este sector empiezan a deshacer posiciones, los que tienen muchísimas pérdidas acumuladas deciden aguantarlas, y algunos inversores arriesgados empiezan a tomar posiciones aprovechando las correcciones. En definitiva, aunque es evidentemente un sector bajista y no hay amago de suelo, la demanda puede empezar a superar a la oferta y al menos equilibrar los precios a corto plazo.




Eurostoxx 600 de energía. Mismas conclusiones que para el anterior sector. Cotiza en la línea que une los mínimos desde el 98 y cerca de los mínimos de 2009. No estoy diciendo que vea un suelo y que haya que entrar, pero sí que es zona donde habrá menos ventas y más compradores.



Eurostoxx 600 sector autos. Uno de los sectores alcistas que ha perdido con claridad los mínimos de agosto. Las razones son obvias por el contagio de Volskwagen. Sería un sector a evitar, y puede que siga corrigiendo hasta la zona de 400 puntos tal y cómo se aprecia en el gráfico. Es un sector con un enorme potencial de crecimiento y en cuanto se depuren responsabilidades y se aclare el panorama, será uno de los que lidere las alzas (hablo del sector y no de valores en concreto).



Todos están muy sobrevendidos atendiendo al RSI semanal. Después tenemos por el lado contrario a los sectores que se benefician de la caída del precio de las materias primas y energía que tendrá que refrendarse en los márgenes de beneficios. Son el sector de consumo básico, consumo discrecional, construcción, Industrial y Salud. Todos siguen siendo alcistas y la corrección puede apreciarse cómo una oportunidad de incorporar a una cartera aprovechando la mejor valoración. Todos ellos por encima de los precios mínimos marcados en agosto.

Consumo básico.


Consumo discrecional


Construcción. 


SALUD


Y por último tenemos al sector bancario. Es caso aparte. Cotiza por debajo de los mínimos de agosto, pero está justo en la media de 200 semanas y cerca de los mínimos de final del año pasado y principios de este año. Así que es otro sector en soporte aunque no presente gran potencial desde el punto de vista fundamental.  



viernes, 25 de septiembre de 2015

Los datos macro siguen demostrando fortaleza

La confianza empresarial en Alemania (Indicador IFO) sorprendió positivamente en septiembre al aumentar por tercer mes consecutivo (108,5 vs 108,4). Este resultado se explica por la mejoría en el componente de expectativas (103,3 vs 102,2), más que suficiente para compensar el descenso en la partida de condiciones actuales (114,0 vs 114,8). Por sectores, mejora la confianza en comercio mayorista y, sobre todo, en comercio minorista que alcanza máximos desde mediados de 2011 y apunta a que el buen momento por el que atraviesa el sector podría mantenerse en los próximos meses.
Hasta el momento, la depreciación del euro ha más que compensado el posible impacto de la desaceleración de China (las exportaciones al gigante asiático representan casi el 3,0% del PIB). Si vemos la evolución de los datos se aprecia que no tienen nada que ver con la evolución de la bolsa.
Es evidente que en las correcciones de esta semana ha afectado significativamente el fraude de Volkswagen. El escándalo que ha supuesto el fraude del fabricante alemán de coches Volkswagen podría impactar negativamente en la evolución de este sector, uno de los emblemas de su industria: el sector genera casi 780.000 empleos (equivale al total de puestos de trabajo creados desde el 4T12), factura el 20% del total de toda la industria. Alemania fabrica el 30% de todos los coches producidos en UE y el 20% de todos los matriculados en Europa. Por tanto, estamos seguros de que los datos de estos indicadores para el mes de octubre corregirán respecto a este mes y es por eso que el mercado ha corregido descontándolo.
Y si salimos de Europa y miramos los datos macro publicados ayer en Estados Unidos. También fueron buenos. Los pedidos de bienes duraderos cayeron menos de lo esperado (-2,0% en agosto frente al -2,3% que anticipaba Bloomberg); además, el balance de los últimos meses es positivo, gracias a la mejora de los dos meses anteriores (+6,1% acumulado). La venta de vivienda nueva aumentó un +5,7% en agosto y consolida el excelente repunte del mes anterior (+12,0%) hasta un ritmo anualizado de 552.000 unidades; máximo desde febrero de 2008 y un +25% por encima de su nivel medio en 2014 (440.000 viviendas).

En los siguientes gráficos se aprecia que por fin la demanda de viviendas nuevas empieza a superar la oferta y Estados Unidos se acerca al  nivel precrisis.




Por tanto, a pesar de los vaivenes del mercado seguimos reiterando que las fortísimas correcciones de los dos últimos meses las ha realizado el mercado anticipándose a datos macro futuros mucho peor de lo que se están publicando. Si continuamos la senda de datos macro no tan malos cómo se espera, el mercado tendrá que corregir parte de las correcciones y será el momento de ajustar las carteras al nuevo entorno de menor crecimiento reduciendo riesgos. No es momento de reducir riesgo cuando el mercado está en fase de pánico y tal y cómo comentábamos ayer, las fases de capitulación siempre han sido más un momento para comprar que para vender.



jueves, 24 de septiembre de 2015

Si la bolsa no está en suelo, no anda muy lejos

Evidentemente cuando el mercado entra en una fase bajista siempre es muy complicado saber dónde se va a frenar e intentar dibujar un suelo de mercado. Es lo más difícil y siempre es preferible comprar un valor, o índice o cualquier activo que sea después de frenar las caídas e iniciar el rebote. Es el dicho de no coger con la mano un cuchillo que está cayendo ya que siempre es preferible dejarlo caer al suelo para cogerlo tranquilamente por el mango.

Pero la sensación que nos trasmiten los últimos acontecimientos con los inversores vendiendo acciones a cualquier precio bajo la premisa de que estamos en una crisis similar a la de 2007 y que es la mejor forma de preservar el capital, o que el mercado le va a dar la oportunidad de comprar más barato dentro de unos meses, nos hace pensar que el suelo puede estar muy cerca, sobre todo en las bolsas europeas. Sólo hay que pensar que en el primer trimestre del año todo el mundo quería tener renta variable europea en las carteras. El inicio de año ha sido el mejor de las últimas décadas y si unimos el recorrido de los primeros meses junto a la recuperación desde los mínimos de octubre del año pasado las subidas fueron espectaculares. El DAX inició el año con subidas del 24.6% en los tres primeros meses y del 48.3% desde los mínimos de octubre. El Eurostoxx un 19% y 37.5% en las mismas fechas, el Ibex un 13% y 26%, el MIB 30 italiano un 23% y 37% y así casi todos. Y si miramos a China vemos que el índice de la bolsa de Shanghai había subido un 59.85% en el año hasta máximos de junio y nada menos que un 154% desde los mínimos de junio del año pasado.

Viendo estos datos está claro que la idea de que los tipos de interés en mínimos obligaría a los inversores a tomar riesgo en renta variable funcionaba y los índices respondían con subidas. A final de año parecía que la recuperación desde octubre era sólo para maquillar el cierre de ejercicio, pero a medida que en enero y febrero seguía la tendencia, todo el mundo tenía claro que con el bono alemán a 10 años casi al 0% y el BCE anunciando un QE hasta septiembre de 2016 los activos de riesgo y las bolsas europeas en particular eran “trending topic”. Y sin embargo en cuanto comenzó el BCE a comprar bonos en marzo se inició el cambio de tendencia. Y es que era el momento de máxima euforia por lo que el techo estaba cerca.

Y es que desde hace semanas estamos reiterando que las bolsas y mayoría de activos financieros no se están comportando según los fundamentales macro y micro. Se están dejando llevar por las sensaciones de los inversores, es decir por la masa. Al igual que a principios de año la bolsa subía a pesar de que Grecia se enfrentaba claramente a la posibilidad de salir del euro o impagar sus deudas, es decir, nadie echaba cuenta de las noticias negativas, ahora la sensación es bajista y nadie oye las noticias positivas y sólo filtramos las noticias negativas a la hora de tomar la decisión.

En el siguiente gráfico se muestran las fases del ciclo del sentimiento del inversor. Según el sentimiento de los inversores se puede pronosticar (según los analistas que siguen la teoría del comportamiento de las masas) el punto de máximo riesgo financiero y el punto de máxima oportunidad financiera.



Trasladado al comportamiento de los índices europeos es difícil saber a ciencia cierta en qué fase del ciclo de sentimiento nos encontramos. Pero entiendo que las fuertes caídas de agosto responden a una fase de pánico, y ahora podemos estar entrando en las fases de capitulación o quizás abatimiento. Y es que mientras más tiempo dure el terreno lateral en el que están inmersos los mercados y sobre todo, si se producen nuevos mínimos respecto a los que se marcaron en la semana del 24 al 28 de agosto, más probable es que los inversores entren en la fase de capitulación.

De todos los principales índices, quizás sea el de la bolsa española el que esté más cerca de la capitulación. Y es que tras varios intentos de recuperar la zona de 10.000 puntos se ha ido de nuevo a cotizar por debajo de 9.500 con caídas fortísimas de valores con bastante peso en el Ibex y que muchísimos inversores minoristas pensaban que no podría caer tanto cómo lo ha hecho.

 Si observamos el gráfico vemos que el verdadero soporte del Ibex estaba situado en la zona de 9.600 puntos. Por ahí pasaba el 38.2% de recorte de toda la subida desde 2012 y los mínimos de este año y cierres de octubre del año pasado. Más abajo el soporte está en 9.270 que son los mínimos de final de 2013 y por último la zona más clara de soporte para el Ibex se sitúa en 8.900 puntos que son los máximos del verano del 2013 y el 50% de recorte de toda la subida desde 2012.



No sabemos si el suelo lo hará ahora (recuperando el 9.600 podría generarse) o si continuarán las correcciones a las zonas comentadas, pero conjugando los dos gráficos anteriores sí que podemos decir que entre los niveles actuales y la zona de 8.900 puntos se encontraría el punto de máxima oportunidad financiera. Si compramos ahora corremos el riesgo de que el mercado siga en la fase lateral bajista y terminemos desesperándonos por no tener beneficios a corto plazo y entremos en la fase de capitulación y abatimiento y vendamos en el peor momento.

A corto plazo por tanto no hay que esperar una recuperación en “V”, pero a medio plazo sí que es bastante probable que la apuesta a niveles actuales en renta variable genere rentabilidades atractivas. En el resto de Europa  Tenemos al Eurostoxx 50 también en zona de soporte. Estamos en la línea que une los mínimos desde 2012 y por abajo tenemos el nivel de 3000 puntos (mínimos de agosto y enero de este año) y por abajo la zona de 2.890 es la zona de mínimos de octubre del año pasado y el 50% de toda la subida desde los mínimos de 2011.



En el gráfico he dibujado el canal alcista iniciado en el verano del 2011. Al igual que a principios de año la euforia provocó que el Eurostoxx rompiera el canal alcista por arriba (con anuncio del QE), ahora la posible capitulación del mercado puede provocar la pérdida momentánea del canal alcista a las zonas comentadas.
Y todo esto motivado simplemente porque China va a crecer un 6.8% en vez de un 7%. Las empresas europeas han tenido muy buen cierre del segundo trimestre a pesar de que el crecimiento de la eurozona ha sido sólo del 1.3%. El beneficio por acción (BPA) de las compañías europeas aumentó un 6% interanual en el segundo trimestre de 2015 gracias a unas mejores condiciones de crédito y a la depreciación del euro. Así que a pesar del bajo crecimiento la micro sigue yendo bien. Pese a que en ese periodo el crecimiento del PIB de la eurozona fue algo inferior a lo esperado, la mejora del entorno económico continúa respaldando a los mercados regionales de renta variable. Las valoraciones de la renta variable europea se han rebajado tras las recientes correcciones lo que, combinado con el buen crecimiento de beneficios registrado por tercer trimestre consecutivo, podría generar interesantes puntos de entrada y hay que tenerlo en cuenta.


miércoles, 23 de septiembre de 2015

De momento la macro europea no se contagia de la contracción china

Ayer comentábamos que el principal motivo de las fuertes caídas era el temor a la publicación hoy de malos datos de la producción industrial de China. Sin duda el principal argumento bajista de los mercados sigue siendo China y las posibles implicaciones de su desaceleración en el resto de economías del mundo, sobre todo en los países desarrollados. Antes de conocerse el dato, las bolsas europeas corrigieron todas más de un 3%, sin duda anticipando que el dato iba a ser malo. Finalmente se ha conocido esta madrugada que el dato de producción industrial ha corregido de 47.3 puntos de agosto a 47 puntos en septiembre. Un dato peor de lo que esperaba el mercado (47.5) y el peor dato desde 2009. Y a pesar de ello las bolsas europeas han abierto en positivo con subidas en torno al 1%.

Se ha vuelto a cumplir lo de comprar con el rumor y vender con la noticia. En este caso ha sido al revés. Ayer los inversores vendieron previendo el desastre de hoy tras el PMI y ya hoy no quedaban más vendedores en el mercado por lo que hoy se recupera gran parte de lo perdido. Y es que además de la producción industrial de China se han publicado datos de producción industrial de Europa. En Europa los datos siguen estando por encima de la barrera de 50 puntos (expansión de la economía) y destaca el mejor dato de Francia (50.4 frente a 48.3 anterior y 48.6 previsto), aunque los de Alemania han salido ligeramente inferior a lo esperado (52.5 frente a 52.6 esperado y 53.3 de agosto). El del conjunto de la eurozona ha cumplido estimaciones (52 puntos frente a 52.3 anterior y 52 puntos estimado).

En definitiva, se demuestra que los peores datos macro de China de momento no están afectando, o por lo menos no tanto cómo se pensaba, a la economía europea. En el siguiente gráfico vemos la evolución de los últimos años de los datos de producción industrial. Los datos de China (línea amarilla) y EE.UU. (línea roja) están decreciendo desde septiembre del año pasado. Sin embargo en Europa la tendencia es claramente creciente desde principios de año, e incluso la producción industrial de Francia vuelve a recuperar el nivel de 50 puntos.

Sin duda no está correlacionado el movimiento de las bolsas europeas con los datos de producción industrial. Así pues, la corrección de las bolsas de momento se observa más por una fase de pánico que por fundamentos de la economía, lo que puede generar una oportunidad de compra a medio plazo.

De todas formas quiero seguir insistiendo en que las bolsas mundiales siguen encuadradas en un movimiento lateral tras las fuertes caídas, y seguimos repitiendo los movimientos del verano del 2011. Insisto porque cada día que hay correcciones de más de un 2%, recibo llamadas preguntando si ha cambiado la tendencia y entraremos en una fase bajista de largo plazo. Basta mirar el gráfico semanal del S&P500 en el que comparo el movimiento de este verano con el del 2011. Ya dije en agosto que tras la fortísima caída del verano del 2011, el mercado estuvo en ese movimiento lateral hasta final del año 2011. Así pues, podemos seguir sin una tendencia clara alternado días de subidas con días de bajadas aún durante unos meses más. Incluso, cómo se ve en el gráfico, en el 2011 el S&P500 acabó el año haciendo nuevos mínimos respecto a los marcados en agosto.


Viendo el gráfico, está claro que puede seguir habiendo recortes a corto plazo, y no se descarta que veamos al S&P500 acercarse a la zona de 1.800 puntos que es la directriz alcista iniciada en 2009 y mínimos de 2014. Pero este sería el peor escenario teniendo en cuenta la situación macro actual. Y si los datos macro de este trimestre y del próximo no son tan malos cómo anticipa el mercado, lo más probable es que se produzca un fuerte rebote tras este lateral. A pesar del pánico que supone ver los precios de las acciones y los índices corregir a pesar de estar en zona de mínimos del año no nos tenemos que dejar llevar por la corriente y vender porque es lo que hace todo el mundo.




Hoy conviene mantener la calma y analizar fríamente la situación en la que nos encontramos. La situación actual es la siguiente:

·         Países desarrollados en fase expansiva y con sus bancos centrales dejando claro que seguirán apoyando para mantener al alza las expectativas de crecimiento futuro.
·         China en desaceleración. Revisa expectativas de crecimiento al 6,8% desde el 7%. Es normal que los datos de producción industrial se contraigan porque desde hace años el gobierno quiere vincular el crecimiento del gigante asiático de la exportación al consumo interno. Además la fortaleza de su divisa evidentemente afecta a las exportaciones. Pero la demanda interna e importaciones seguirán creciendo con fuerza compensando el deterioro de sus exportaciones, y esto es muy positivo para las multinacionales de los países desarrollados.
·         y sólo algunos emergentes en recesión.  Pero sus divisas están muy castigadas, por lo que en algún momento el tipo de cambio servirá de mecanismo de ajuste para que estos países puedan salir de la recesión gracias a la mejoría de competitividad vía devaluación.
·         Las materias primas y energía están en mínimos históricos (o mínimos de la última década según el caso), y seguirán estando baratas a corto plazo. Este es otro dato positivo para las compañías europeas y de Estados Unidos puesto que abaratan los costes de producción.
·         Los tipos de interés seguirán estando en mínimos históricos. Es otro claro apoyo a los activos de riesgo. Las empresas seguirán reduciendo sus costes de financiación y los inversores seguirán viéndose obligados a asumir algo de riesgo en renta variable si quieren obtener rentabilidad por sus ahorros.   

Con este panorama que he resumido, sinceramente creo que no es momento de vender renta variable y sí para ir aprovechando el movimiento lateral para hacer una cartera de largo plazo con exposición a renta variable. O al menos, el que ya tenga renta variable no parece que sea el momento de venderla. Y dentro de la renta variable siempre es mejor apostar por renta variable global con sesgo a países desarrollados manteniéndose de momento al margen de los mercados emergentes.




martes, 22 de septiembre de 2015

Caídas generalizadas a la espera de los importantes datos macro de mañana

Se presumía un inicio de semana tranquilo en las bolsas globales a la espera de la publicación de importantes datos macro a partir del miércoles. La victoria de Syriza (quien lo diría) parecía que tranquilizaría a los mercados. Sin embargo hoy a pesar de que los futuros venían en positivo, todas las bolsas europeas están corrigiendo con fuerza. Son varios los factores que están afectando:

·         Materiales básicos, baja 2,5% nada menos castigado por la debilidad de hoy de los metales en Asia, y además por el mal profit warning de Outokumpu. Este valor está arrastrando a todo su sector y así Aperaman baja 7%, Acerinox ya están viendo que pierde más del 8%, Arcelor, SSAB y Salzgitter también bajan con fuerza. Sin duda la bajada del precio de las materias primas se está reflejando en los beneficios de las empresas del sector.
·         El sector de automoción también baja con fuerza, afectados por Volkswagen. Es algo muy grave, y que puede hundir a la compañía, y más habiendo reconocido la irregularidad que denuncia Estados Unidos del Software que controla la emisión de gases.
·         El máximo think tank, o banco de ideas, ligado al Gobierno chino ha rebajado su estimación de crecimiento para este año, así que el objetivo del 7% es cada vez más difícil de alcanzar, algo parecido a lo que pasó con el del año pasado. La estimación para ellos está ahora en el 6,9% y la causa principal es la baja inflación.
Y el resto de sectores bajan contagiados y creo que también se están viendo afectados por la posibilidad de que mañana la publicación del PMI manufacturero de China (sobre todo), de Europa y de Estados Unidos (el jueves será el de Japón) confirmen que la ralentización económica va en serio. Para China se espera un PMI manufacturero de 47.9 frente a 47.3 de agosto. Si saliese un dato bastante peor, podría continuar la sangría en la bolsa. Por el contrario, si los datos no defraudaran, la caída de hoy se revertiría en compras.

En definitiva, mantenemos la misma hipótesis que venimos comentando desde final de agosto. Se alarga el periodo de incertidumbre y la mayoría de índices bursátiles se mantienen en un terreno lateral a la espera de ver si los datos macro confirman el escenario pesimista que están descontando las bolsas. Si miramos los principales índices vemos que todos se mantienen aún en el terreno lateral intentando dibujar un suelo que no termina de confirmarse. Y claro, mientras más días pasan sin que se produzca el rebote, más dudas tienen los inversores y más probabilidad de que haya nuevas correcciones.
  
Evolución del S&P500. La semana pasada no pudo superar la zona de 2000 puntos sigue manteniéndose cerca de máximos. Si los datos macro de esta semana




En Europa tenemos al Eurostoxx 50 de nuevo cerca de la zona crítica de 3.100 puntos que son los máximos de 2011 y la media de 500 semanas. Un cierre semanal por debajo de 3.100 puntos podría llevar al Eurostoxx 50 al siguiente soporte que se sitúa en la zona de 2.900 puntos (media de 200 semanas y mínimos del año pasado y máximos de 2013).


Dentro de Europa, el más amplio Eurostoxx 600 está en zona de soporte clave. Máximos del 2014 y línea que une los mínimos desde 2011. No obstante siguiendo con las similitudes de la corrección del verano de 2011 se observa que tras la fuerte corrección de agosto el Eurostoxx 600 hizo nuevos mínimos varias semanas más tarde antes de comenzar el inicio de la fase alcista que ha durado hasta abril de este año. Viendo cómo está la situación y el modo pánico en el que entran alguno de los sectores, no se puede descartar que el Eurostoxx 600 vuelva a la zona de mínimos del año pasado que pasa por la zona de 315 puntos (mínimos del año pasado y media de 200 semanas).



En Europa, el índice más débil es el Ibex 35. Es el único de los principales índices mundiales que esta semana está cotizando en la zona de mínimos de la semana del 24 al 28 de agosto. Sin duda penalizado por Brasil y las elecciones de Cataluña. Viendo el gráfico se observa que en la zona de 9.300 tenemos la media de 200 semanas y los mínimos de 2014 y mínimos de final del 2013.



Los mercados emergentes que tenían pinta de hacer suelo y recuperar los máximos de la semana del 24 al 28 de agosto. Sin embargo justo al tocar la zona de mínimos de 2011 que eran soporte que ha perdido en agosto, se ha girado a la baja creando dudas. En tanto no se supere la zona de 840 puntos no se puede apostar por un suelo en este mercado.


Y así las cosas, no conviene dejarse llevar por el pánico en días sucesivos de caídas ni por la euforia tras días de subidas. Se necesita conocer de verdad si la situación macro es tan mala cómo anticipa el mercado antes de tomar la decisión de reducir riesgo antes de salir del rango lateral.



viernes, 18 de septiembre de 2015

Tras la FED sabemos que los tipos seguirán bajos por mucho tiempo

Ya comentamos ayer que era imposible predecir cómo reaccionaría el mercado a la reunión de ayer de la FED. La situación era complicada. Si subía tipos de interés, el mercado podía reaccionar mal puesto que corría el riesgo de comenzar a retirar estímulos en un momento en el que la recuperación económica de Estados Unidos y global está en entredicho. Y si no los subía, también podría reaccionar mal puesto que el mercado podría entender que a pesar de los buenos datos macro de Estados Unidos, la FED sí que está preocupada por las implicaciones de la debilidad de China y Brasil para el crecimiento global. Por eso esta semana nos inclinábamos por una solución intermedia que pasaba por subir los tipos un octavo de punto o 10 p.b., pero finalmente la FED se decidió a mantenerlos, y provocó un mal cierre de las bolsas americanas justo al borde de claras resistencias, lo cual genera bastantes dudas sobre la continuidad alcista de los principales índices de renta variable.

Y es que La FED no subió tipos pero la preocupación ahora está en los términos utilizados en el comunicado, porque su mensaje ha sido mucho más suave de lo esperado. No es lo mismo no subir los tipos porque el momento no ha llegado que no subirlos porque hay nuevas amenazas de medio y largo plazo para el crecimiento global, así que esto último supone una amenaza para los mercados. Y así, es complicado que los principales índices rompan al alza a corto plazo los niveles de resistencia que estamos comentando en las últimas semanas. En un repaso a los principales gráficos vemos que todos siguen dentro del lateral.

Evolución semanal del S&P500. Aunque ayer antes de la FED el S&P500 cotizaba por encima incluso del nivel crítico de 2.000  puntos, terminó cerrando por debajo de los máximos de la semana del 24 al 28 de agosto. Salvo que hoy acabe el S&P500 en positivo, todo apunta a que habrá que esperar una semana más para saber el desenlace de la renta variable a medio plazo.


La FED está preocupada por la recuperación global pero no por la recuperación de la economía norteamericana. Si miramos la evolución del Russel 2.000 (más vinculado al ciclo de Estados Unidos) vemos que sí que ha recuperado los máximos de la semana clave del 24 al 28 de agosto habiéndose parado al igual que el S&P500 en la zona que une los máximos desde 2009.


Los índices europeos siguen igual. También han hecho amago de romper por arriba sin éxito. El más claro es el Eurostoxx 50 que hoy está en mitad del rango entre 3.100 y 3.300 puntos.






Incluso el Hang Seng, a pesar de tener una semana positiva, sigue dentro del rango.



El índice de renta variable más indicativo de la situación actual vuelve a ser el MSCI World. Se ha parado justo en la línea que une los mínimos de 2009. Y esta semana la zona de máximos del año 2007 que coincide con los mínimos de 2015 perdidos en agosto ha confirmado que es la resistencia de corto plazo. Así que tenemos soporte muy fuerte en la zona de 1.550-1.570 puntos, y resistencia en la zona de 1.670 puntos. Un cierre sobre 1.670 confirmaría el rebote en la directriz alcista y un cierre por debajo de 1.550 confirmaría un techo de largo plazo para las bolsas globales. Mientras tanto, insistimos que estaremos en el terreno lateral a la espera de conocer los datos macro de este tercer trimestre y los adelantados del cuarto trimestre de 2015 para saber cuál será el escenario más probable.


Querer adelantarnos al siguiente movimiento comprando tras varias sesiones de subidas o vendiendo tras varias sesiones de bajadas dejándonos llevar por el sentimiento del mercado sólo nos provocará mayor incertidumbre, desasosiego y grandes pérdidas, y cuando se produzca el movimiento clave es posible que nos pille a contrapié.

Tras la reunión de ayer de la FED lo que tenemos que tener claro es que los tipos de interés van a seguir estando muy bajos durante mucho más tiempo del que se estimaba. Esto a corto plazo está generando un recorrido adicional en la renta fija que es lo que más está subiendo hoy. Si ayer veíamos que el bono del tesoro a 10 años americano estaba cerca del 2,30% hoy está bajando a niveles del 2.15%. Eso es una subida del precio del 1.25% desde que hablo Yellen ayer tal y cómo se aprecia en el siguiente gráfico.



Pero a medio plazo, la bajada de rentabilidades de los bonos (hoy el movimiento del bono americano se está produciendo casi en todos los bonos tanto corporativos como gubernamentales), es un buen soporte para los índices de renta variable. Tras la reunión de ayer, las probabilidades de que incluso no haya subida de tipos en las dos reuniones de este año han subido con fuerza. Incluso ha aumentado las probabilidades de que no haya subidas de tipos en el primer semestre del 2016. En el siguiente pantallazo de bloomberg se aprecian las probabilidades de movimiento de tipos para la reunión del próximo 15 de junio. A principios de año la probabilidad de que no hubiese movimiento para esa fecha era del 0.32% y hoy es nada menos que del 18.8% siendo el tercer escenario más probable. El primer escenario más probable para esa fecha es una sola subida (36.8% de probabilidad) y el tercer escenario más probable es el de dos subidas de tipos (29.3%). Curiosamente estos eran los tres escenarios menos probables a principios de año según se ve en las gráficas de abajo. En enero de este año el escenario más probable era que los tipos estuviesen en el rango 1%-1.25% (26%), subida al rango 1.25%-1.5% (22%) y subida al rango 1.5%-1.75% (12.4%). Es decir, al menos cuatro subidas de tipos.



Los bonos y el dólar ya llevaban todo el año descontando esto, por lo que ahora el dólar debería ajustar que la FED seguirá con una política monetaria muy agresiva y por tanto tendría que corregir gran parte de la fortaleza que ha demostrado en los dos últimos años. Hoy frente al euro ha pasado de cotizar a 1,13 antes del mensaje de la FED a 1.145 de esta mañana. Algo similar ocurre contra el resto de divisas. Sólo sigue fortaleciéndose frente al real brasileño tal y cómo se aprecia en el gráfico que venimos actualizando en las últimas semanas.  



Por tanto, tras la debilidad de las bolsas de hoy por la sensación agridulce del mensaje de la FED preocupado por el crecimiento mundial, entendemos que mejora bastante el panorama a medio y largo plazo para los activos de riesgo, puesto que habrá tipos de interés muy bajos durante muchísimo tiempo y no parece que el dólar tenga que seguir fortaleciéndose al ritmo que lo ha venido haciendo e incluso podría debilitarse por la política tan agresiva de la FED.