Finalmente, y gracias a los buenos datos macro americanos, los inversores se decantaron por la venta de bonos “refugio”. Un dato tan importante como la confianza de los consumidores estadounidenses se situó en máximos de cinco años, al repuntar hasta los 76,2 puntos, superando los 72,3 que esperaban los analistas. Por otra, el índice de precios de la vivienda registró el pasado mes de marzo la mayor subida en siete años, al repuntar un 1,4%.
Decíamos ayer que era muy importante para los activos de riesgo que los futuros de los bonos americanos perdiesen los mínimos del año. Pues así se produjo, y con bastante rotundidad tal y como se aprecia en los siguientes gráficos.
Evolución del futuro del bono a 10 años americanos.
Evolución del futuro del bono americano a 30 años.
Si analizamos la evolución de la Tir, en vez del precio, se aprecia que es la primera vez en el último año que el bono se estabiliza por encima del 2%. Y es que la mejoría de los datos macro hace que el mercado comience a descontar que Bernanke comience a rebajar las compras de deuda estadounidense, sobre todo de largo plazo. Por tanto los inversores se están adelantando y venden ahora que de momento está la contrapartida de la FED. En el siguiente gráfico se refleja la evolución comparada del futuros del bono a 10 años frente al S&P500. Se aprecia lo que comentamos en el titular de las claves de hoy, ya que las subidas de la bolsa (linea amarilla) vienen acompañadas de ventas de bonos (linea naranja).
Y es que las ventas se han producido en la parte más larga de la curva. Los plazos cortos apenas han visto subir su rentabilidad, ya que los inversores entienden que hay menor riesgo de tener minusvalías en estos plazos. Y esto es muy positivo, ya que en los últimos días se está produciendo un nuevo aumento de la pendiente de la curva 2-30 años que en anteriores ocasiones hemos comentado que es sinónimo de fases alcistas del ciclo económico y bursátil. En el siguiente gráfico comparamos la evolución de la curva 2-30 años y las bolsas para el mercado americano (inferior) y el alemán (superior), siendo la línea amarilla la renta variable y la blanca la pendiente de la curva de tipos.
Por tanto, el giro alcista que hemos vivido en las últimas sesiones en los activos de riesgo tiene su apoyo en la renta fija. Ahora hay que analizar si los principales índices de renta variable terminan rompiendo resistencias. En los siguientes gráficos analizaremos los niveles en los que están los índices europeos.
Evolución del Eurostoxx 50. Ayer hizo nuevos máximos anuales, aunque en cierre no terminó de confirmar la ruptura. Se necesitaría un cierre por encima de 2.850 para confirmar.
Evolución del Eurostoxx 600. Este índice más amplio, no pudo superar los máximos históricos. Es necesario un cierre por encima de 311 puntos para confirmar la tendencia alcista.
Evolución del DAX Alemán. La misma figura que el Eurostoxx 600. Se necesita un cierre por encima de 8.560 para confirmar el rebote.
Evolución del Ibex 35. En los gráficos de velas diarias que solemos ir analizando se apreciaba el lateral entre 7.800 y 8.600. Si ampliamos el plazo y analizamos el gráfico de velas semanales se aprecia la tremenda importancia de la zona de máximos del año. Superar esta zona no sólo significaría romper los máximos de 2011 y mínimos de 2010 sino terminar de superar la directriz bajista desde los máximos de 2007. Es por tanto una zona crítica para nuestro mercado cuya superación haría que los inversores extranjeros volviesen a mirar a nuestro mercado.
Y un índice que no solemos estudiar y que también está cotizando en una clara zona de resistencia es el CAC 40 de Francia. Este índice sí que ayer cerró en máximos anuales y está atacando a la zona de máximos de 2.010 y 2.011. Una zona que coincide justo con la media de 500 semanas y cuya superación confirmaría la tendencia alcista de largo plazo del mercado francés tras el doble suelo en los mínimos de 2.009 y 2.011.
Y tanto para que rompa el Ibex, como el CAC 40, necesitamos el apoyo de los bancos europeos. Ayer fue el sectorial que más subió ayudado por declaraciones de miembros del BCE de que pueden haber más bajadas de tipos y la mejoría de recomendación por parte de las agencias de rating a la banca americana. En el siguiente gráfico del Eurostoxx 600 se aprecia que estamos justo en la zona de máximos del año e intentando superar la media de 200 semanas. Romper definitivamente el nivel de 180 puntos, podría llevar a los bancos hasta su siguiente resistencia en la zona de 250 puntos, con lo que provocaría la ruptura tanto del índice español como el francés.
Y para intentar ver si la situación del sectorial bancario está mejorando, analizamos en el siguiente gráfico la evolución relativa del sectorial bancario frente al Eurostoxx 600. Se aprecia que aunque lentamente, se está produciendo un giro alcista y desde el verano del 2012, los bancos lo hacen mejor que Europa. Una vuelta que se confirmaría con un cierre de este índice de valor relativo por encima de 0.61 puntos.
Por tanto, los inversores están muy pendientes de Europa y del comportamiento del Ibex, CAC 40 y sectorial bancario para ver qué ocurre con las resistencias. No en vano, hoy estamos pendientes de las recomendaciones de la Comisión Europea para cada miembro de la Unión Europea (UE) y se espera que confirme la extensión en dos años del plazo para cumplir el déficit tanto para España como Francia. Y se espera para la primera semana de Junio que la “Troika” de a conocer su análisis sobre el examen realizado al sistema financiero español en los últimos días. A priori, todo apunta a que las noticias serán positivas y las resistencias terminarán superándose. Pero las resistencias están ahí y quizás sea mejor esperar a su superación para tomar decisiones de incrementar más riesgo en Europa.