miércoles, 15 de abril de 2015

Pendientes de Grecia pero.... ¿Para comprar o para vender?

A los miembros del Eurogrupo se le agota la paciencia y al gobierno griego el dinero. Pero estos últimos siguen sin presentar la lista de reformas exigidas por sus principales proveedores (que ahora no quieren llamar Troika). Está claro que Grecia es la principal fuente de incertidumbre hoy en Europa. Ayer fue un claro  lastre con todo tipo de comentarios sobre la posibilidad de declararse en quiebra, o de pedir nuevas elecciones, hoy las cosas están más tranquilas, ya el BCE vuelve a tranquilizar la situación y ha añadido otros 800 millones de euros a la ayuda de emergencia bancaria hasta los 74.000 millones de euros.

El caso es que ahora son dos las apuestas que hay que hacer en el mercado europeo para pensar en la sostenibilidad de la fuerte tendencia alcista.

1.       ¿Impagará las deudas Grecia ya o habrá que esperar unos meses?; ¿Habrá otras elecciones?; ¿Saldrá Grecia del Euro?
2.       ¿Mejorarán los resultados empresariales del primer trimestre según las expectativas que se han formado los inversores?

Lo que está claro es que el mercado es bastante optimista tras ver que apenas se suceden dos días seguidos de correcciones en la renta variable europea. Incluso me atrevo a pensar que la salida de Grecia de la zona euro o que no pague sus deudas está ya bastante descontado. Hace unos días comentaba que los bonos griegos a más de 10 años cotizaban todos en torno al 50% de precio. Esto quiere decir que si hoy mismo dice Grecia que tiene capacidad para pagar sólo el 50% de la deuda, eso ya está descontado en precio. Va claramente implícito en la prima de riesgo.

Por ejemplo, el bono griego a 10 años vence en febrero del 2025, paga un cupón del 3% y se puede comprar hoy al 52,4% de precio. Para una operación de 100.000 euros de nominal, si Grecia pagase el 100% de su deuda a vencimiento los flujos para el comprador serían los siguientes:

·         Paga hoy 52.400€
·         Cobra 10 cupones brutos de 3.000 euros cada 24 de febrero hasta el vencimiento.
·         A vencimiento le devuelven 100.000 euros.
·         La rentabilidad anualizada de la operación es del 12%.

Con los tipos al 0% en Europa, si todos los inversores tuviesen claro que Grecia puede pagar lo que debe, evidentemente estos bonos no estarían cotizando a los precios actuales. Estos mismos 52.000 euros invertidos en el bono alemán generarían los siguientes flujos:

·         Pagaría hoy 52.800 euros si compro 51.000 euros nominales del bono 0.5% febrero 2025.
·         Cobraría 10 cupones brutos 255 euros de cupón hasta el vencimiento.
·         A vencimiento le devuelven 51.000 euros.
·         Rentabilidad de la operación 0.13%

Incluso pagando Grecia la mitad de lo que debe, el que invierta hoy en un 10 años griego tendría una rentabilidad mayor que el que invierta en un bono alemán. Con este ejemplo evidentemente no estoy diciendo que haya que invertir en bonos griegos, sino que claramente está descontado que Grecia no podrá pagar sus deudas. Lo que quiero decir es que el que compre un bono griego tiene que tener el cuerpo preparado para no recuperar el 100% del nominal invertido. Además, a diferencia de la anterior quita de la deuda de Grecia en el momento actual, aparte de estar descontado cómo hemos demostrado, no le va a “pillar” a los bancos europeos. La banca europea ha tenido tiempo más que suficiente para deshacer todas sus posiciones en deuda griega. Este mismo bono griego que hemos comentado es fruto de la conversión de bonos que se hizo en la reestructuración de la deuda en el año 2012.  Llegaron a cotizar por debajo del 13% de precio hasta más del 80% de precio del verano pasado. Una subida de nada menos que el 563% en poco más de 2 años, tal y como se aprecia en el gráfico. El que la banca europea no tenga posiciones es clave para eliminar el contagio del probable default de la deuda griega.   


Así pues, los mercados siguen su clara tendencia. Es más, nos preocupa para la tendencia de lago los resultados empresariales que los problemas de Grecia. Si vemos los gráficos de los principales índices europeos no se aprecia agotamiento alguno. Evidentemente el mejor comportamiento de Europa respecto a Estado Unidos responde a que el mercado descuenta que la debilidad del dólar, la caída de las materias primas y el diferencial de tipos de interés de la deuda corporativa a favor de Europa se va a reflejar sí o sí en la evolución de los resultados empresariales, con una subida de los BPA mucho mayor en Europa que en Estados Unidos.

Si finalmente no se cumple y vemos que en este primer trimestre las compañías europeas no cumplen o superan expectativas, entonces sí que habrá de nuevo una recogida de beneficios y tendremos techo en la renta variable de la zona euro. De lo contrario, si la mejoría macro se traduce en mejores resultados empresariales, seguiremos la tendencia claramente alcista.  

Evolución del Ibex 35. Sigue en clara tendencia alcista. Situamos el peor escenario a corto plazo en la zona de 11.250 que es la resistencia que se superó el mes pasado.


Evolución del DAX 30. Soportes en la zona de 11.550 (media de 50 sesiones) y peor escenario en la zona de 11.000 puntos.



No tratamos de ser adivinos, pero viendo que hay muchísimos inversores fuera del mercado, con liquidez que hoy no se remunera, entiendo que si en los próximos días surgiese la noticia de que Grecia no va a pagar la deuda o que salen del euro, evidentemente habría volatilidad y los inversores harían caja por lo que la renta variable europea sufriría. Pero creo que conforme los índices se acercaran a los soportes que hemos comentado y señalado en rojo, los inversores desviarían la liquidez hacia la renta variable tratando de aprovechar estos recortes.

Precisamente la semana pasada tratábamos de poner en valor la tendencia mirando la situación desde una perspectiva de largo plazo. Y es que tengo la sensación de que el que está invirtiendo hoy en el Ibex no está mirando si llegaremos esta semana o la que viene al 12.000, sino que tiene bastante claro que es más probable que en uno o dos año estemos más cerca de 13000 que de 11000. Y es que es así cómo realmente hay que mirar la renta variable en nuestras carteras, al menos para la posición estratégica de la cartera. Para apuestas tácticas sí que podemos ser algo más flexibles y dejar algo de liquidez en cartera (o estar invertidos en activos poco volátiles) para poder aprovechar los hipotéticos recortes que se pudieran producir.

Así pues, en respuesta al titular de las claves de hoy, creo que el mercado está más pendiente de Grecia para comprar que para vender. Si esperamos a que Grecia plantee reformas que gusten al Eurogrupo y estos prolonguen las ayudas, y también esperamos a que los resultados empresariales europeos ratifiquen la mejoría macro y de expectativas, entonces el mercado habrá subido tanto que no nos atreveremos a entrar y si entramos sí que tendremos una alta probabilidad de entrar en un techo de mercado.



No hay comentarios:

Publicar un comentario