Ahora que está
cerrando el mes de octubre queda demostrado que los mercados siguen teniendo
clarísima adicción a las actuaciones de los bancos centrales. Las correcciones
a plomo desde final de septiembre se iniciaron el día que Draghi afirmó que el
problema de Europa no es de política monetaria y que el BCE no podía hacer nada
más. Sin embargo hoy, salvo los índices de renta variable europea, tanto los de
renta variable de Estados Unidos como los de Emergentes van a cerrar (salvo
correcciones fuertes hoy) el mes en positivo y ya se ha olvidado el pánico
vivido en la primera quincena del mes.
¿Y qué ha cambiado?
Por un lado los
resultados empresariales en general están sorprendiendo al alza. Han publicado
ya 350 empresas del S&P500. El 75% ha vendido más de lo esperado por un
conjunto del 4.8% más del trimestre anterior. Los beneficios han crecido nada
menos que un 10,2%, y el 80% ha superado previsiones en este aspecto. En Europa
han publicado 210 compañías del Eurostoxx 600. El 64% han mejorado sus ventas
respecto al trimestre anterior y los beneficios han crecido en conjunto un
12.9% con el 62% de las compañías mejorando previsiones en este apartado.
Pero lo que
realmente ha cambiado es que, en cuanto el mercado ha corregido con fuerza, los
bancos centrales han seguido mostrando su apoyo. A lo largo del mes hemos ido
comentando cómo el BCE apoyó a la deuda de Grecia en cuanto la tir del 10 años
heleno se disparó al alza, y también apoyó a los bonos corporativos en cuanto
los diferenciales también subieron. Además en esta última semana Yellen a pesar
de acabar con el QEIII comunicó que los tipos de interés seguirán en mínimos
históricos más tiempo de lo previsto y el balance del BCE se mantendrá en
máximos (recomprará los bonos conforme vayan venciendo). Y esta madrugada para
acabar la gira de Bancos Centrales, nos hemos encontrado con la sorpresa del
Banco de Japón. El Banco de
Japón anunció hoy inesperadamente que acelerará entre 10 y 20
billones de yenes (unos 71.866 millones de euros o 90.491 millones de dólares)
el ritmo anual al que pretende incrementar la base monetaria de cara a impulsar
el crecimiento y la inflación en el país asiático.
En definitiva,
las señales que han mandado los bancos centrales de que están ahí y seguirán
estando si la situación macro empeora, ha provocado que la mayoría de índices
vuelvan a la zona previa a la amenaza inicial de Draghi. Pero volvemos a lo
mismo. La situación macro no termina de cambiar y uno de los pocos alicientes
alcistas que nos encontramos a estas alturas es que los bancos centrales están
ahí. Al igual que pasó a principios de esta semana con la publicación de los
test de estrés, ahora corremos el riesgo de que tras esta reacción tan alcista
a las medidas del Banco de Japón, en las próximas sesiones, el mercado entienda
que la situación macro es bastante mala y por eso obliga a actuar al banco
nipón.
No obstante,
tal y como hemos comentado, en el cierre mensual se ha conseguido salvar un
match ball muy importante. En los siguientes gráficos de velas mensuales se
aprecia que si en la segunda quincena no hubiésemos rebotado con fuerza el
escenario técnico de largo plazo se hubiera complicado muchísimo.
Evolución del
S&P500 en velas mensuales. La media móvil de 12 sesiones (un año) ha sido
perforada en el mes, pero el cierre será claramente por encima. Después de una
tendencia alcista tan clara, tanto en el 2000 como en el 2007 los cruces a la
baja de esta media marcaron el inicio de las dos últimas claras tendencias
bajistas. Además el MACD mensual está en situación similar a las de los máximos
anteriores.
Evolución del Eurostoxx 600 en velas mensuales. Justo estamos en la media de 12 sesiones y la vela de este mes es un clarísimo martillo que demuestra que la tendencia previa puede continuar. Detrás de este martillo lo que subyace es lo que hemos comentado esta semana. No es otra cosa que una limpieza y corrección severa para que los índices vuelvan a recuperar la fuerza alcista.
Evolución del MSCI World en velas mensuales. Otro que ha aguantado la media de 12 sesiones y la vela es un martillo o hammer. Es una vela alcista que nos indica que a pesar de que el MACD nos pone en aviso de que los mercados pueden estar en techo, la tendencia es fuerte y hay ánimo de continuarla.
Así pues,
iniciamos a partir del lunes un nuevo mes y encaramos el final de año con la
mayoría de índices bursátiles en terreno neutral. El MSCI World sube un 1.5%
con Estados unidos viendo entre el 3% y 7% y Europa en negativo (-0.5% Eurostoxx
y -2.95% el DAX) y Japón plano tras las subidas de esta madrugada. Si miramos
los gráficos de corto plazo vemos que cotizamos sobre todo en Europa en el
escenario neutral que venimos barajando desde principios de verano.
Hoy el
Eurostoxx 600 está cotizando justo en la zona de medias de 50 y 200 sesiones y
mitad del canal alcista iniciado en los mínimos desde 2011.
El Ibex 35
también está justo en la zona de medias de 50 y 200 sesiones.
Por tanto, tras
el susto de este inicio de octubre, insistimos que esta recuperación nos ha
llevado a un nivel neutral y es ahí donde deberían estar situados los niveles
de riesgo de los inversores según su perfil. Hay que tener riesgos en cartera
pero no los máximos que estén dispuestos a asumir. Reiteramos que es la única
forma de poder apreciar las correcciones como oportunidad de comprar. Sea por
el apoyo de los bancos centrales, o porque los fondos de inversión están en
máximos de liquidez, pero queda demostrado que las correcciones de momento son
oportunidad de compra.
Los bancos
centrales se empeñan, sin éxito, en generar inflación. Pero de momento, los
inversores sí que en cierta medida apuestan a que finalmente conseguirán que la
inflación repunte. El siguiente gráfico del índice de materias primas CRY,
vemos que está a punto de confirmar un claro suelo en los mínimos desde 2012.
Si este índice rebota, las expectativas de inflación obligatoriamente deben
subir y beneficiarían la tendencia alcista de los activos de riesgo.